viernes, 26 de marzo de 2010

Rendición de cuentas.-

La “rendición de cuentas”, como denomina el Gobierno a sus frecuentes intervenciones mediáticas, es propaganda. Las cadenas no aparecen como “rendición de cuentas”, sino que, por sus constantes imprecisiones y contradicciones, parece una “transmisión de cuentos”.

En el mensaje de sus intervenciones el gobierno insiste en asuntos que consideran conveniente difundir en el momento político adecuado. Incluso atacando a ciudadanos a los que considera enemigos del régimen.

O sea no para la campaña.

Sin embargo, las acciones más publicitadas por los propios gobernantes, han terminado siendo el centro de gruesos papelones revolucionarios.

En medio de las cinco campañas electorales, entre 2007 y 2009, el gobierno, lanzó varios proyectos de trascendencia. El solo anuncio de ellos dejó asombrado a más de un ciudadano y expectantes a muchos otros.

Por ejemplo, Coca Codo Sinclair: proyecto con estudios desactualizados. En 2007 el Gobierno no tenía idea cómo ejecutarlo, sin embargo ya hubo primera piedra.

Por qué en una rendición de cuentas, tres años mas tarde, no se nos dice lo que pasó: ni argentinos, ni chinos concretaron nada. Los chés no tuvieron plata y los chinos la ponen en unas condiciones muy poco “solidarias”.

Por qué no rinden cuentas sobre que el proyecto sigue en nada y que el Presidente cosechó réditos políticos poniendo la primera piedra dos veces.

Coincidentemente cada “operación primera piedra” se dio, como queda dicho, en medio de una campaña electoral.

Por qué no rinden cuentas sobre lo sucedido en 2008 en la campaña por el “si” con el lanzamiento de la refinería “El Aromo” en Manabí: primera piedra y show. No hay estudios, la refinería cuesta una millonada y no hay petróleo ecuatoriano para abastecerla, además de que a los venezolanos se les está acabando su enorme caja de dinero merced a los múltiples desaciertos de su gobierno.

Esto solo un par de ejemplos comentados.

Falta que haya rendición de cuentas sobre el tema del super hermano y su elevada cantidad de contratos.

Falta que haya rendición de cuentas sobre la hermana presidencial y los casinos.

Falta que haya rendición de cuentas del tren eléctrico transandino.

En fin…

La rendición de cuentas es hacer saber a la sociedad lo que le interesa y le afecta en su conjunto, no lo que el aparto de propaganda manda a publicitar a través de su mejor actor: el Presidente.